No salgo de mi asombro, al ver como maestros (personas con rostro, nombres y apellidos, educadores de nuestros hijos) del Colegio Miraflores de Zaragoza, pide a la administración que a familias de su centro escolar entre otros muchos centros, sin tener en cuenta que esas familias también están sufriendo el recorte salarial - sino el paro en algunos casos - y desentendiéndose de la brecha social y económica que supone en las aulas y en el ámbito educativo la falta de recursos económicos, proponen determinadas medidas de recortes sobre los libros, materiales escolares y actividades extraescolares.Lamento que consideraron que la educación gratuita para todos era un derroche y que no se dieran a entender cuando el resto de la sociedad y de las familias tenían también más o mejores recursos económicos. No se que pensar de esta actitud, pero me preocupa que se llamen maestros.
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