Docentes.

Leo con atención lo que estos días se escribe sobre la jornada continua que solicitan los maestros/as para sus colegios. Lamento que esto mismo no lo pidan para la asignatura de religión, o para reparar determinadas situaciones que provocan compañeros/as docentes en las aulas.
Nos han hecho comulgar con rueda de molino tantas veces como han querido en los Consejos Escolares. Siendo papel mojado los protocolos de actuación que no se apliquen exclusivamente al alumnado. Pasando a resolver individualmente situaciones que se “vician” en algunos centros educativos pero que quedan en el currículo oculto del mismo.
A mi me queda claro que es una reivindicación laboral y como tal todo mi respeto. El problema es que todos quieren jornada continua de 8 a 15,00h. ¿y por qué no unos empiezan a las 8 otros a las 9 otros a las 10? Los educadores tendrían jornada continua y el alumnado jornada partida.
Quieren taparnos la boca con que nuestros hijos/as estarían en el colegio hasta la hora que quisiéramos haciendo actividades extraescolares. A esto quisiera contestar que las actividades extraescolares no evalúan en el currículo académico del alumnado. Así pues lo que necesitan nuestros hijos e hijas es vocación del docente y éxito escolar del alumnado, además de recordar que estamos hablando de niños y niñas de 3 años entre otras edades.
En fin como dijo Voltaire "La mejor recompensa por un trabajo bien hecho es haberlo hecho”